domingo, 30 de diciembre de 2007

Las palabras

Las palabras siempre se repiten
porque las palabras sentidas
siempre son las mismas
Lo que escribo tiene siempre
la misma tristeza
la desolación y el miedo
del futuro solitario
del amor perdido y añorado
de las personas muertas.
Las palabras son todas hermosas
pero están tan llenas
desbordan el dolor, la tristeza
a veces el amor.
Se escriben solas
salen de mi boca y de mis manos
y se trazan sobre el papel desnudo
como si tuvieran vida propia.
Y la tienen, las palabras son vida
sentimientos, son la memoria y el olvido
son el corazón de los amantes
y el lamento del herido.
Las palabras contienen mi espíritu agobiado
mis ilusiones vanas, pero vivas
contienen, a pesar de todo,
mis esperanzas.

sábado, 29 de diciembre de 2007

La tristeza

La tristeza se cierne como la niebla
sobre mi cuerpo, sobre mi alma
Y los atrapa.
Los ata con la cuerda de la nostalgia,
de los recuerdos perdidos.
Si pudiera recordarlo todo
si pudiera extender la memoria
a cada instante.
El tiempo arrastra consigo
las hojas del otoño
Ya es invierno
Ahora siento frío
y mi corazón no se entibia
con los retazos del ayer hundido
en las simas de la muerte.
Tus ojos han perdido su color intenso
en mi memoria
Tus manos están frías
esas manos que tanto besé cuando te ibas.
Me dejaste aquí tan indefensa
y tan deprisa
Nos dejaste a todos tan solos.
Papá, donde estés, sabes
lo mucho que te anhelo.

jueves, 27 de diciembre de 2007

La tarde ha caído

La tarde ha caído
como una losa, la oscuridad
ha llenado mi mundo.
La noche cerca alrededor
los límites que mis ojos alcanzan,
es una valla alta.
Me quedo quieta
envuelta en el halo negro
misterioso y helado.
Estoy tan sola
todo es tan lejano
ni sueños ni ilusiones.
Y la soledad más absurda
la dolorosa falta de otra mano
que oprima mis dedos enredados.
La noche es larga
y el amanecer tarda un poco más
cada día que pasa.
Me cuesta tanto
llegar a la mañana
y desenredar mi cuerpo.
Me cuesta tanto
vestirme de colores
y olvidar el llanto.
Tal vez mañana las cosas
sean diferentes
Tal vez mañana la noche
no me envuelva
Tal vez mañana el día
se haga eterno
Tal vez mañanea
pueda resistir
y alargar el tiempo.
Quizá la noche no me envuelva
y otras manos entretengan
mi cuerpo abandonado.
Me queda la esperanza
aún no estoy hundida
ni atrapada.
Aún puedo volar
os lo aseguro.

viernes, 21 de diciembre de 2007

Ya no habrá primaveras

Por donde corrían las aguas del deshielo
corre hoy la sangre de la tierra
la sequedad eterna del tiempo
que ha matado la hierba
Ya no llueve nunca
y si llueve, el horizonte se anega
los ríos han encontrado el camino cortado
las ciudades se ensanchan y se alargan.
Las entrañas de mi mundo hieden
el hombre ha arrojado su miseria
sobre los huecos abiertos de la tierra
y ha sembrado la muerte en las raíces
de los árboles que en vez de crecer
mueren, retorcidos bajo el manto gris
del polvo urbano
Y el sol que no calienta, sino quema
testigo del horror, del desencanto
de este mundo que fue el paraíso
y pronto será un páramo
Llegará el tiempo de pagar los errores
y entonces, ya no habrá primaveras.

La línea del horizonte

Atravesando la línea
que marca el horizonte
han volado mis ojos
buscando en la memoria:
El tiempo de la juventud
del amor insensato
El viento de los surcos marinos
de la arena encendida
Los ojos de los hombres perdidos
de los amores muertos
El velo de las sombras veloces
de los retrocesos y avances
Pero hoy
anclada a un suelo yerto
siento que mi tiempo no espera
Mis manos asen el vacío
Y el sol no calienta mi corazón baldío
El aire huele a rosas marchitas
La esperanza es vana
La efímera visión de mi pasado
es el último adiós a los tiempos
en que había un mañana
Hoy el horizonte se alarga
como un alambre de espinas
y me hiere
No hay sitio para mi en el otro lado
Pero tampoco en este

jueves, 20 de diciembre de 2007

Volveremos

Volveremos algún día a la niñez
al tiempo de la ingenuidad
al tiempo de aprenderlo todo
al tiempo en que todo era bello.
Volveremos a ver el mar y las gaviotas
con ojos de niño
y a jugar con las olas rebozados de arena
sin temerle a nada
Volveremos del hoy hasta el ayer
de la piel curtida y arrugada
al ombligo terso, al calor perdido
del vientre protector de nuestra madre
Volveremos desandando el camino
deshaciéndonos de lo bueno y de lo malo
olvidando los amores y los odios
al núcleo de la vida
Y volveremos a nacer, llorando
con el destino marcado en nuestra frente
sabiendo que el futuro es negro
que el tiempo ha marcado la baraja
Volveremos a crecer sabiendo
que las ilusiones mueren solas
que los sueños se pierden
y que lo único cierto es que todo está perdido

El pasado, amor

Hoy vuelvo a pensar en el pasado
en los tiempos de ilusión y sueños
en los tiempos en que todo era posible
Hoy he vuelto la mirada al infinito
y he visto el final en mis entrañas
he fijado la vista en las aves que volaban
y he revuelto el arcón de los recuerdos.
Y he creído verme como era
tan ingenua, tan feliz, tan inocente
tan crédula
Hasta que llegaste tu
y me abriste los ojos hasta herirlos
lloré cuanto pude, un mar entero
pero tuve en tus brazos la pasión
supe que el amor lo puede todo
que te hace perder el corazón
y odiar la libertad
Me convertí en tu puerto y tu morada
porque te amaba tanto vida mía
Pero tu destrozaste nuestra casa
y tachaste nuestra historia de los libros
Hoy he vuelto a recordar
los momentos más horribles que he vivido
Si el tiempo que te tuve
fue la más alta cumbre que he alcanzado
también fue el infierno más atroz
que pueda una mujer vivir cuando termina
Con la gloria de amar
de darlo todo sin pedirte nada
no vi que tu mirada se enturbiaba
que el tiempo aceleraba mi caída
que tu camino solitario te llamaba
y que el adiós era tu objetivo.
Hoy el tiempo se me acaba
y todo el resto de mi vida parece haber volado
tu fuiste mi principio, la mayor de mis heridas
y hoy que siento que el final se acerca
solo puedo recordarte a ti.

domingo, 9 de diciembre de 2007

Perdóname

Te estoy perdiendo
y la verdad es que no me importa
No se lo que ha pasado
el amor se me ha escurrido de las manos
sin notarlo
Ha sido un proceso paulatino
cada día has perdido un poco de tu brillo
cada día he visto un poco más
tu verdadero yo.
No tienes la culpa
el amor te hace ver lo que no existe
O ignorar lo que sabes
Te he querido con un amor tan mio
y tan intenso
que ahora pienso
que hubiera podido querer a cualquiera.
Perdóname
Nunca sabrás lo que he sentido
al pasar el tiempo
Nunca sabrás cuanta desilusión
cuanto vacío hay en mis entrañas.
Ahora no tengo nada de ese amor
que me llenaba entera
y rodeaba mi existencia.
Ahora se que nunca has existido
como yo te amaba.
Perdóname
y vete, tranquilo, sigue tu camino
y olvídame
porque nunca me has tenido.

martes, 27 de noviembre de 2007

Un recuerdo tan dulce y tan amargo

Un beso con los ojos cerrados en sonrisa
con esa hermosa boca húmeda de lluvia.
La calle el escenario
y la gente que pasaba los testigos
de nuestro amor infinito
Tu y yo, en medio de ninguna parte
sin nada más que nos hiciera falta
o importara
Tu y yo solos en el mundo
en el centro de la mirada ajena
Y después, sin saber porque
sin hablar, sin decir adiós
sin explicarte, todo se acabó
Me quedó un recuerdo tan dulce
y tan amargo
Tanta rabia y aún así tanto amor
Que no soy capaz de olvidar
esos pocos días de pasión y gloria
en los que tu sola mirada, tu roce
me hacía volar hasta la cima del mundo

lunes, 26 de noviembre de 2007

Descansa

Abres tu boca
y como un trueno
resuena en mis oídos
tu voz enronquecida.
Has llorado con lágrimas de sangre
hombre mio, en mi brazos refugiado
tu frente sobre mi hombro
tu corazón en mi mano.
Como te he querido, cuanto
y cuanto he querido llorar contigo
pero necesitabas mi fuerza
y la has tenido.
Te he sujetado, abrazada la cintura
y he logrado mantenerte erguido
hombre mio,
cuanto más te he amado
al verte tan herido.
Descansa, yo vigilo
mis ojos no dormirán esta noche
Taparé tu cuerpo con las mantas
y vigilaré tu sueño, tu respiración.
Mañana amanecerá de nuevo
y el nuevo día traerá vientos más suaves
te lo prometo vida mía.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Quisiera

Quisiera ser la luna que te observa
o el viento que acaricia tus mejillas.
La sombra donde cobijas tus miedos
donde demuestras tu ira.
Quisiera dejarte entre las manos
el tiempo que nos queda.
Confiarte la misma vida mía
Que el velo misterioso que te envuelve
se deshaga en el amanecer lluvioso
de esta madrugada.
Porque no te alcanzo
no llego a tu medida ni a tu altura
te siento lejos y distante
y frío
Y cuando te toco
tu piel no se entibia
ni tus ojos se encienden como antes.
Miras, pero a un horizonte más allá de mi
de mi amor entregado
A lo lejos se esconden tus sueños
y mis miedos.
La suerte está echada
y el mañana escrito.
No puedo retenerte
ni seguirte.
Quisiera que el destino fuera otro
pero no puedo, el mio es perderte.

lunes, 19 de noviembre de 2007

Augurio

Sería incongruente
deciros que estoy viva
pero siento la muerte.
Está cerca del cerro donde camino
donde cada tarde dejo un poco de mi misma
entre los matorrales secos.
Está entre los árboles del parque
la muerte, agazapada
como la misma muerte desbrozada
como la penitente vida desahuciada.
Augurio de la soledad futura
apagas mi sol con una sombra dura
que envuelve mi pasión y mi cordura.
Y envuelves, en harapos negros
la vida que soñé para mi
cuando era niña.
Y enredas en tus hilos negros
los hijos que no tuve
los amores que se fueron perdiendo.
Es todo tan triste y pertinaz
tan largo y tan corto a la vez
que no quiero que acabe
pero quiero terminar.
Descansar de una vez de los tormentos
de los miedos que habitan en mi alma
de mujer.
No quiero más que nada más
llegar al puerto, al que me toque.
Atracar y tumbarme en la cubierta
yerta, hasta que el adiós me llegue.

sábado, 17 de noviembre de 2007

Todos los días

Tengo tanto de ti
pero es tan poco...
Te veo cada dia
y cada día oigo tus pasos y tu risa
pero estás tan lejos...
Los meses y los años van pasando
y el tiempo va limando el dolor
la certidumbre de saber
que nunca besarás mi boca
y que mi nuca sensible no sentirá el roce
de tus dedos.
Mis brazos se quedarán vacios
o rodearán cuerpos que en realidad no desean.
Mis ojos mirarán los ojos de otros hombres
pero solo sentirán los tuyos.
Mi cama se cubrirá de hielo en el verano
y el dolor se irá apaciguando.
Qué de tiempo perdido
a la espera, inútil,
porque tu siempre has amado a otra.
No te he visto mirar a nadie más
ni coqueteos, ni requiebros,
Ninguna mujer ha podido
acorralarte en un rincón y hacerte pensar
que podrías serle infiel.
Que podrías hacer en otro cuerpo
las locuras que hacías en el suyo.
Y yo, que siempre esperaba
observando y temiendo
he consolado la muerte de mis sueños
pensando que no has querido a nadie más
que a ella.
Que ni yo, ni ninguna otra mujer fuimos,
en un mundo de locos y amor fácil,
una opción.

jueves, 8 de noviembre de 2007

Me equivoqué

Miré tus ojos mentirosos,
traicioneros
y no vi más que lo que quise ver:
Amor bajo una luna llena
Y sábanas revueltas de pasión.
El tránsito fue rápido y tan duro
Te dí la vida entera
en una noche eterna de locura ciega
de cálidos susurros y caricias lentas.
Y en la mañana,
en la adormilada ternura de tu cama tibia
me miraste, y en tus ojos no había nada
ni amor, ni calidez,
ni siquieras pudiste pronunciar mi nombre.
Y mi desnudez se hizo grande
y ocupó todo mi cuerpo,
la habitación entera.
Y la vergüenza se hizo también grande
y me cubrió.
Alcé mi cuerpo de la cama
me vestí y atravesé la puerta
y tu no dijiste una palabra.
Y en el pasillo lloré la desnudez y la vergüenza
de la pasión inútil,
del sexo traicionado
de la inocencia perdida.
Cuando pude irme
me sentí, dejando de lado todo lo perdido,
mujer,
mujer herida por primera vez.

Tengo miedo

Tengo miedo,
miedo de que el tiempo
en su caminar pausado inexorable
acabe por fin de un solo golpe mortal
con lo poco que queda de mi amor
El tiempo y tu
enemigos de mi inocencia
de la crédula dulzura que cogiste entre tus manos
que alojaste en tu corazón maldito
para aplastarlas lentamente
Ahora mi sangre se cuela entre tus dedos
Aprietas mi corazón
y el dolor es cada vez más grande
pero ahora yo no temo
el tiempo y tu pronto acabaran errados
y mi duelo comenzará
entre el anhelo y el alivio
de haberte perdido.
Mi ojos han llorado
pero ya apenas lloran
Ahora observan tu manos sucias
tu alma negra que se hace nítida
y visible en ese rostro de piedra
El tiempo ha aclarado mis mirada
y he visto en tu mirada misteriosa
ambición y muerte.
Y en tu casa he visto
hombres como tu, reunidos
sentados a la mesa de la miseria del mundo
y la pobreza
repartiendo porciones de riqueza.
Que ciega
que tonta enamorada.
Pero ya he crecido
y ahora entiendo que los hombres no cambian
que quizás ni siquiera tu me has engañado
que fui yo sola la que cree mi ídolo
la que le puse cara a un sueño de niños.
Adiós amor imaginado
dejaré atrás contigo el dolor del engaño
las mañanas desoladas
Me montaré en el tiempo
y me marcharé en busca de horizontes
de una vida nueva.

lunes, 5 de noviembre de 2007

Mi cuerpo

Mi cuerpo
es fuente solitaria
Atarceder ante una noche quieta
Fuerte y débil
Grande y pequeño
Mi cuerpo es lo que siento
lo que se de mi misma
Lo que nadie sabe
Mi espejo me devuelve una blancanieves
aspirante a reina de corazones
caducada
Romántica escaldada una y mil veces
amante en paro
Mujer con miedo y tal vez,
tal vez, con ganas de amar de nuevo

Pájarillos

Pájaros de mi ciudad
pajarillos
empollados en nidos imposibles
Aprendices de equilibrista
pollos
sobre las cuerdas de tender.
Comedores de migas y migajas
basureros ecológicos de las terrazas
de las aceras.
Planeadores que escapan de los coches
en la tramposa calzada.
Pájaros grises y marrones
de los colores del humo y el ruido.
Madrugadores pájaros
de pico y pluma en ristre
y piar inoportuno.
Cantores de la soledad
en los balcones de las casas vacías.

viernes, 2 de noviembre de 2007

Te sigo amando

Te sigo amando.
En el rincón más oscuro de tu alma
me he escondido
y espío el amor que no me has dado
entre las brumas del sueño y el olvido.
Espío a quién le das ahora
lo que yo he perdido.
Te sigo amando.
Me encierro en el fondo de tu alma
y me amarro al vacío
abrasador de la soledad y de la rabia.
Te he perdido sin saber porque
ni como.
Sin ser consciente y sin conciencia
te has perdido entre las hierbas
altas del camino
y has abandonado lo que más querías
Todo está perdido.
Que pronto has olvidado
Te miro con la envida del que se ha quedado
solo.
Te sigo amando.
Me entierro en lo profundo de tu alma
y trato de rasgarte las entrañas.
Quiero que sufras como yo he sufrido.
Que no te sientas libre
para volver a amar
cuando mi herida está tan tierna.
Lávate las manos
y deja sangrar al corazón
hasta que la sangre salga roja y no negra.
Deja que los humores malignos salgan de tu cuerpo
Tal vez entonces yo abandonaré tu alma.

viernes, 26 de octubre de 2007

Adiós

El hombre que me amaba se ha marchado
ha dejado sus huellas en la cama
y ha marcado mi cuerpo con sus manos
Pero se ha marchado
ha recogido sus cosas, lentamente
mirando sobre su hombro como le observaba
diciéndome cosas con sus ojos.
Pero ha hecho las maletas
se ha tomado un café
sentado sobre los pies de la cama
bebiendo sorbo a sorbo, lentamente
mientras yo le observaba
y el me decía cosas con sus ojos
Pero su boca callaba.
Sobre el espejo de la cómoda
veía su espalda
su pelo negro, su nuca desorientada
y sabía que no vería mas de el en el futuro
Porque hay cosas que el amor no cambia
yo no puedo dejarlo todo
y el tampoco
Son muchas las horas de vuelo
entre su casa y la mía
muchas las cosas que nos atan
los sentimientos amarrados
la distancia.
Nuestro amor, intenso
no puede con todo
De modo que cogió sus cosas
miró en derredor sin mirar nada
y supe que no quería decirme adiós.
Me acerque y le abrace con fuerza
no quise besarle
ya le besé anoche por última vez.
Me agarré a su cuerpo unos instantes
y después, muriendo, le empujé a la puerta
y cuando salió,
en cuanto se dio la vuelta
cerré.
Ahora solo lloro y paseo por la casa
tan sola, tan oscura
como la esperanza perdida
de saber
que nunca le volveré a ver.

martes, 23 de octubre de 2007

Árboles

Es el tiempo del otoño
Los árboles se desprenden de sus hojas
y las ramas pierden la vergüenza de mostrarse
Pero su desnudez es falsa
Les cubre la corteza, el viento
el sol que asoma tibio y las calienta
Las mecen las risas de los niños en el parque
y el suave murmullo de las fuentes
Y cuando pasen los días al invierno
y el frío amenace congelar su savia
las cubrirán, afortunadas ramas
hojas nuevas
Será el tiempo de la primavera

lunes, 22 de octubre de 2007

Tu vientre

Tu vientre es vértigo en mis manos
Tu vientre es sendero misterioso
Tu vientre es amor y es desengaño

Tu vientre es el terrerno donde mi sexo anida
Tu vientre es el mar que moja mis caricias
Tu vientre es el monte que mi boca escala

Tu vientre es el sol que quema mis heridas
Tu vientre es la pasión que me hace daño
Tu vientre es el vientre de los hados

Tu vientre es mi vida, pero también mi muerte
Tu vientre es magia, pero también locura
Ti vientre es libertad, pero también tragedia

Tu vientre es la sed saciada
Tu vientre es el amor colmado
Tu vientre es mi futuro y mi pasado
Tu vientre es mi presente

jueves, 18 de octubre de 2007

Entra en casa

El sol que te calienta se ha marchado
y se ha quedado fría tu piel sobre la hierba
Desnudo tu cuerpo no resistirá la noche
que se acerca
Se que apenas puedes levantarte
que no te queda alma para huir
pero por mi, por lo que quieras
levanta de esa tierra que te ata
camina bajo la sombra de la luna quieta
y entra en casa
Nada te parecerá tan triste
cuando este día aciago se termine
y amanezca
Podrás con el, podrás seguir andando
aunque la sangre de tus venas esté helada
y tu corazón muerto
Abre los ojos y levanta,
por mi, por lo que quieras
álzate sobre la hierba blanda
camina bajo la sombra de la luna quieta
y entra en casa.

Troncos

Ha pasado el tiempo de los sueños
de las vides en flor
de los jazmines.
Melancolía de átomos de luna
colándose curiosos en los ojos
de los otros.
Encuadran con sus iris rotos
la oscuridad de la noche,
y en su belleza,
palabra vana y hueca,
han plantado semillas venenosas
Las heridas en los surcos dibujados
de esta tierra maldita
pronto sangrarán cual manantiales
Y enriquecido el color negro
de la muerte
por encima del sol y la belleza
se regará con los líquidos que brotan
de la fuente
Y nacerán de las ramas de los árboles
retorcidos miembros
monstruos sobre los troncos abrumados
con las heridas abiertas
y en los surcos, navegando,
las ilusiones muertas.

lunes, 15 de octubre de 2007

Dedos

Los dedos de mis manos andan solos
caminan sobre tu piel blanca
siguiendo los surcos del otoño
Se enredan en tu vello crespo
y cuentan tus colinas y tus huecos
Mis dedos se cuelan en tu ombligo
y en tu ombligo nadan y bucean
Los dedos de mis manos andan solos
Se asoman a tu vientre misterioso
y dudan
Les da vértigo seguir por las vertientes
que marcan tus caderas enredadas
en el vello furioso de tu pelvis
Pero les llama el volcán que de tu vientre surge
y siguen mis dedos el camino abajo
hasta la base
Y suben contoneándose nerviosos
trepando, acariciando, susurrando roces
desbrozando tu piel
En donde late el corazón más puro
la más fiera pasión, la más ardiente
mis dedos se despliegan obedientes
Y procuran el llanto silencioso
liberador, aterrador, hermoso
del amor desatado, incontinente,
y poderoso

Mala suerte

Salían de todas partes
como hormigas huyendo del hormiguero
pero no reconocí ninguna cara
Los ojos de los que pasaban no veían
y chocaban contra mi.
Mi cuerpo se ancló sobre el asfalto
esperando rostros conocidos
que no llegaban
El olor a sangre y a terror
devoraba mis pulmones
pero la espera era infinita
los mios estaban allí
Por fin dejaron de salir
solo se oían lamentos y quejidos
algunos se arrastraban hacia afuera
pero no salían
Los veía por la grieta enorme
abierta como un vientre herido
en el muro espeso
Veía los cuerpos informes
pero no veía a los mios.
Empezaron a llegar las ambulancias
hordas de mujeres y hombres se acercaban
ahora en dirección opuesta
chocaban contra mi espalda.
Corrían a sacar a los muertos
y a los heridos
corrían a rescatar la vida del infierno
donde solo había restos de carne quemada.
Al cabo de no se cuanto tiempo
volví la espalda al caos
y eché a andar contra corriente
sabiendo que los mios
no habían tenido suerte.

miércoles, 10 de octubre de 2007

En silencio

Me iré en silencio
sin que nadie note que me he ido
no haré ruido.
El silencio de la noche será el único testigo
me iré despacio
y no derramaré sobre el camino
ni lágrimas ni gritos
Acallaré los lamentos de mi corazón maldito
hasta que llegue al límite del bosque.
Pero allí, gritaré hasta quedarme muda
Levantaré mis ojos hacia el cielo
y maldeciré, maldeciré desesperada
Luego me tenderé sobre la hierba
haré surcos en la tierra
y en ellos plantaré el olvido.

martes, 9 de octubre de 2007

La memoria

La memoria traiciona mis recuerdos
y cambia las historias en mi mente.
Pero lo importante permanece.
Aunque pierdo los detalles
no he perdido la sensación de tu tacto
o el olor de tu piel
Aún recuerdo el color de tu pelo
y como se encrespaba con la lluvia.
Y aún puedo sonreír con tu sonrisa.
Partí detrás de un sueño
con la soberbia de mi juventud por equipaje.
No recuerdo si te dije adiós.
Dejé atrás la vida entera.
Y ni tan solo mis ojos se volvieron a mirar
al alejarme.
Hoy han pasado los años,
soy más vieja, quizá no mas sabia
y lo que fue da igual.
Ya ni siquiera estoy segura de que tu me amaras
tal vez te fuiste tu
tal vez yo me quedé mirando en la ventana
La memoria me traiciona,
me engaña, me pone trampas
en las que caigo siempre
siento la nostalgia
cuando hace mucho que me llegó el olvido.
Pero es el último vestigio del pasado.

viernes, 5 de octubre de 2007

Tal vez llueva

Tal vez llueva
El cielo gris desatará su furia
Yo lo miraré tras las cortinas
Que no me vean los rayos asomarme
Que obvien mi cara, mi figura
Yo respetaré sus atronadores ruidos
Y las descargas que en zig zag
Castigarán al negro pararrayos
Que no podrá escapar.

Negro

He visto entre las rejas de la casa
tu figura flotando sobre el suelo
Quizá lo he imaginado,
pero fue tan real...
He entrado en la casa en la que habito
y he buscado tu rastro entre las sombras
tengo la casa oscura, la luz no entra
porque mi corazón es negro
La locura de amor ha fundido con fuego
los límites de mi alma.
El fuego de la pira funeraria
El fuego de la destrucción total
Ahora no soy nada
Me agarro a ti como a mi salvación.
Pero tu no existes.
No puedes salvarme de la desesperación
de esta pasión de odiar que me consume.
Odio a todos los dioses de la tierra
Y odio a los hombres que viven
porque tu estás muerto.
Y odio las sonrisas en las bocas
de los que no sufren.
Y bebo solo de las lágrimas de los tristes.
Cierro los ojos, las ventanas y las puertas
cierro los oídos y las manos
cierro mi corazón, mi boca abierta
En negro me siento sobre la moqueta
la oscuridad total, la más abyecta,
cierro mi garganta y mis pulmones
cierro mí hígado, mi páncreas, mis riñones
cierro las venas, cierro a la sangre su fluir continuo.
Cierro al dolor los órganos restantes
no soy nada, nada siento
solo que mi respirar es lento, cada vez más lento, más lento.

Tu rostro

Ángel de bronce
rostro pétreo de sacerdote azteca
Las alas desplegadas de un águila
sombrean tus ojos redondos, admirados.
Bajan por la ladera de tu mejilla
las sombras alargadas que conducen a tu boca.
Bajo el perfil de un dios solemne,
la línea horizontal que aprieta las palabras.
Tu rostro en cruz me habla
de otro tiempo,
de otros pobladores de la tierra.
Tu rostro en cruz me hace arrodillarme
pagana ante tu cuerpo.

miércoles, 3 de octubre de 2007

Llueve

La noche ha transcurrido
entre el sonido de la lluvia contra los cristales
y el dormir agitado de mi corazón herido.
Hoy no amanece.
El cielo permanece gris oscuro
La lluvia cae con fuerza y limpia las calles
donde la noche ha dejado sus huellas.
Abro la ventana para oler la tierra mojada
pero en la ciudad no hay tierra
Ni hay hojas que retengan las gotas de agua.
No se como pasaré este día
aunque la lluvia ensancha mis pulmones
mi corazón se muere.
El suave golpeteo que ahora escucho
sosiega,
calma,
duerme,
mi pena se enreda entre las lágrimas serenas
de un cielo que parece comprender
como me siento.
Pero no hay sitio para el olvido
toda esta lluvia no ahoga
mi corazón herido.

martes, 2 de octubre de 2007

El hombre que espera

El hombre se movía inquieto
por las paredes bajaban las sombras de la tarde
y en la ventana que vigilaba la escena
morían los geranios.
El hombre miraba su reloj
y al cielo, como buscando en el sol
una hora más temprana.
No se a quien esperaba
ni se que motivos le tenían agitado
tal vez una cita de amor
tal vez un compromiso de negocios
El hombre caminaba
cuatro pasos al norte,
y vuelta, cuatro al sur
Sobre la acera, sus pasos resonaban
esperaba quizá a alguien del pasado
o del futuro
Quien sabe
A nadie hablaba. Miraba su reloj
y en su mirada se iban velando las horas de la tarde.
No se cuanto tiempo estuvo allí
ni se si vino alguien a su encuentro
Cuando la noche cayó, calló la calle
cerraron las puertas los comercios
La ventana del geranio se cerró
Y el hombre seguía caminando
Cuando yo me fui, antes de doblar la esquina
miré una última vez
y su figura, recortada por las sombras de la luna
seguía caminando y su mirada
era la de un hombre perdido.
A la mañana siguiente, ya no estaba.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Por si vuelves

Está sucio el cristal de la ventana
tal vez haya llovido mientras dormía.
Tal vez hayas venido a casa.
No hay huellas de pisadas sobre el suelo
pero siempre te limpiabas los zapatos
para no manchar la madera inmaculada
brillante, capaz de reflejar los rayos de sol
que se colaban por la ventana.
Siempre fuiste cuidadoso con las cosas
ordenado y limpio
pero conmigo...
conmigo las cosas fueron diferentes
fueron la tormenta infinita
el ocaso cada día replicado, mil ocasos
mil heridas.
Conmigo el amor era desgarro
dolor y sangre
azotabas con tu lengua mi voluntad exagüe
el amor maldito que me ocupaba cuerpo y alma.
Entera, eras tu, me poseías
con tu mirada encendías las llamas
de la pasión, pero también del odio.
Y aún así, tu fuiste el que dejaste mi casa
cuando yo no sabía respirar sin ti
beber si no era de tu boca
hablar si no eran tus palabras las que hablaban.
Pero se, porque en mi locura reviso cada día
los rincones de esta casa
que te llevaste las llaves
quien sabe si vuelvas algún día.
No te preocupes, estaré esperando
tras la ventana llorosa y empañada
donde no se refleja mi corazón herido.
No te preocupes por manchar el suelo
he colocado de alfombra mi dignidad perdida.

miércoles, 26 de septiembre de 2007

No vendrás

Hoy han florecido las rosas del jardín.
Pero tu no lo has visto.
La primavera ha pintado florecillas
en los lados de la vereda,
ante la puerta abierta.
Hemos blanqueado la casa
y el dintel brilla bajo el sol
invitando a entrar.
Cálida portada al paraíso.
Pero tu no has entrado.
Han entrado tus amigos y los mios
tu familia y la mía
tu hijos y mis hijos.
Han entrado las ráfagas del viento suave de la tarde
y los rayos del sol en la mañana.
Y por la noche entrarán los cantos de los grillos.
Pero tu no has venido.

He cerrado la puerta.
Quizá mañana deje de soñar.
Me levantaré temprano,
saldré al jardín
regaré las flores,
y me sentaré ante el camino largo
por el que no avanzas,
ante la puerta abierta.
Luego caminaré hacia la locura
con los puños cerrados y los ojos cerrados
desandaré el camino hacia la casa
atravesaré el pueblo
cruzaré las negras rejas del infierno
y me postraré rendida ante tu tumba.

¿Quien soy?

¿Quien soy?
Me miro en el espejo
y veo unos rasgos que no reconozco.
Miro mis manos
y se que no son mías.
Y la voz con la que grito
es una voz desconocida.
Por dios, ¿Quien soy?
donde está la sombra que proyecto
el olor de mi colonia.
Con que ojos miraré los ojos que me aman.
El no me reconocerá.
Pasará de largo y esperará en vano que yo llegue.
Por dios, ¿Quien soy?
Si he cambiado, decidme quien soy
que familia tengo
donde vivo.
Quién me abraza en las noches de invierno.
Y sin ya no soy quien era
¿porque aún recuerdo mi casa?,
la ternura de mi madre
al hombre que aprieta mi corazón
mientras dormimos.

lunes, 24 de septiembre de 2007

Torturador

Miro el mapa
y señalo el punto en el que estás,
con mi dedo índice.
Aplasto la superficie de cartón.
Dedo asesino, ojalá pudiera matarte
aplastar todo el dolor que produjiste
con una venganza fría.
Cuando no lo esperes
el enemigo paciente se mostrará ante ti
implacable, como el dios vengador
de los mortales inocentes
de los hombres de mirada límpida.
Ojalá lleguen mis manos hasta ti
hasta ese cuello que soporta tu cerebro negro
tu ojos rojos de sangre
tus oídos poblados de alaridos.
Con mis propias manos sacaría tu corazón sangrante
si estuviera en tu pecho.
Pero tu pecho ha de estar vacío de corazón
solo masas sangrantes deben poblar
tu tronco desolado.
Solo venas a punto de estallar
que llevan la sangre de otros muertos
Tu no tienes sangre, como no tienes alma.
Solo un hálito de vida, ronco y miedoso
con el terror de no saber quien es tu verdugo
al notar sobre la piel desnuda
el aire de la muerte.
No es justicia, ni siquiera sirve para evitar un llanto,
pero al menos el torturador ha muerto.
Ojalá le esperen en las puertas del infierno
las tropas de un dios enfurecido
que desmembren su cuerpo y lo castiguen
aún después de muerto.
Y que las almas de los muertos inocentes
de los hombres de mirada límpida
descansen, por fin, en paz.

viernes, 21 de septiembre de 2007

Subía por la ladera de siempre

Subía por la ladera de siempre
Por la que bordea el viento de levante
El mar a mis pies ensortijado
Oscuro con puntillas blancas
Bajo las gotas de la lluvia
¡Que estanque de sombras!
Bajo el horizonte gris, encapotado
Desafiante vórtice del cielo plomizo
Encabestrando el altar maldito
De los marineros muertos
De los barcos hundidos
De los pecios dormidos en el tiempo.

Melancolía

Melancolía por no verte
Melancolía por no oirte
Melancolía por no poder hablarte

Melancolía del tiempo en que me amaste
Melancolía del pasado
Melancolía del llanto derramado
Melancolía del corazón herido.

Melancolía por lo perdido
Melancolía por mis brazos vacíos
Melancolía por mi boca seca
Melancolía por tu corazón ausente

Melancolía porque es ya el tiempo del olvido.

Las heridas

Las heridas necesitan restañarse
Necesitan tiempo,
Pero también olvido.
Las cicatrices del cuerpo sanan,
pero las del alma...
Las del alma solo se hacen capas
planas, amontonadas,
cubriendo la salida del humor maligno
que envenena la sangre.
Las heridas del cuerpo
sanan.
Las del alma permanecen,
constante recuerdo de lo mal vivido
de las traiciones y los besos malditos
de los amigos muertos
de las travesías que no han llegado a puerto.

jueves, 20 de septiembre de 2007

Distancia

Lo peor de la distancia
es el silencio
Silencio en el correo
en el teléfono
en mis oidos.
Para nuestra distancia
no hay modo de enviar unas palabras
porque nuestra distancia
es el silencio
de quienes no tienen nada de que hablar.

Mi falda

Cada día, como sale el sol,
me esperabas a lo lejos en tu calle.
Caminaba, mientras tu medías
el ondular de mi falda.
Marcabas con tus dedos
el ritmo de mis pasos sobre la mesa
uno, dos
uno, dos
izquierdo, derecho.
Hasta que llegaba a tu altura.
Yo ni te miraba
pero al pasar sentía tus ojos en mi espalda
sobre la falda.
Y tus dedos seguían su repiqueteo.
Uno, dos
uno, dos
izquierdo, derecho.
Aún recuerdo que me hacías sentir valiente,
más alta, ya mujer.
Que en tus ojos vi, por primera vez,
la mirada de un hombre que quiere a una mujer.
Entonces no entendí que te pude tener
Y sin embargo, hoy, comprendo que tu sabías
que me podías tener,
y no quisiste.
No quisiste, tal vez, manchar mi inocencia,
cruzar las barreras de lo bueno y lo malo
o quizá, simplemente,
no supiste como llegar hasta mi boca.
Hubiera sido tan fácil, una sola palabra,
un gesto de tu mano...
me hubieran llevado hasta tu casa.
Quién sabe.
Los recuerdos son bellos.
Quizá mucho más bellos
porque solo fueron un sueño imposible.
Pero hoy, aún busco tu mirada en otros hombres.

miércoles, 19 de septiembre de 2007

Poema del naufragio

He perdido en el naufragio
lo que más amaba
y he dejado mi alma navegando
sobre las negras aguas
bajo los negros cielos.
En el final del mundo
he perdido la voz y la palabra.
Solo el mar alimenta con su brea
mis lágrimas amargas.
El odio feroz ha derramado
mi sangre sobre la sangre de los otros
los cuerpos yacentes sobre el agua densa
descansan sin paz.

Desesperanza

Efímero mundo, artificial y tramposo
caminas paralelo a mi paso
pero nunca entras.
Y yo nunca me subo a tus railes
fácil estela de hombres solitarios
de mujeres solas
de niños muertos.
Que raices pueblan tus entrañas:
vísceras y sangre derramada
miembros amputados
y corazones rotos.
Tal vez almas vagando
buscando una paz que no ha existido nunca
cerrando sus heridas invisibles
gimiendo con lamentos que se oyen desde aquí
desde el infierno en el que aguardo
mi turno.

martes, 18 de septiembre de 2007

Locura

Miro tu rostro
y veo las arrugas que el tiempo ha dibujado.
Las trazo con el dedo, las estiro.
Acaricio tus labios que están secos
y me asomo a besarlos.
Los froto con la humedad que me provocas
con el deseo que se enreda en mis entrañas
Hombre, en tus ojos está escrita
la desesperación que sientes por amarme.
Y mis ojos te responden que te amo
Y olvido la razón, por ti
olvido que no puedo colgarme de tu cuello
y dejarlo todo.
Tengo la cabeza
y el corazón llenos de ti.
No cabe en mi cuerpo el aire que soplas en mi boca.
El sudor que mana de tu frente,
el llanto que destilas por tus ojos.
Todo va a mi boca.
A esta boca enorme que te traga entero
para guardarte, para aislarte de todo lo demás.
Pasión desesperada que no puede vivir en este mundo.
Amor de locura
De ojos y oídos estallados
De corazón henchido
Amor que no soporta la más mínima intrusión
que quiere la soledad más absoluta
un amante frente a otro
y todo girando fuera de su órbita
Ellos dos, nosotros, es todo lo que importa
tampoco el mañana importa
ni nadie
Egoistas del amor, insolidarios
dejadnos solos.
No necesitamos comida ni agua,
nos comeremos y nos beberemos
a dentelladas, como animales
Olvidaremos el pasado y el futuro
y buscaremos la muerte en el amor más puro
más absoluto
Olvidadnos, nosotros no queremos nada de vosotros

He corrido tanto, amor

Te noto tan lejos
No solo en la distancia
El tiempo que nos separa es lo peor
Tu, la juventud y la belleza.
Yo, la decadencia de la vida a saltos
Del amor usado
He corrido tanto amor
Que he llegado ya al final
Aquí no existen las veredas
Ni las rosas trepan las ventanas
En el lugar en el que habito
Solo hay hierbas marchitas
Y el hueco en el que tengo tu retrato
Se oscurece con el paso de los días
Llega el otoño
Y cada día que pasa siento mas adentro
Que aquel tiempo pasado en que me amaste
Solo fueron los sueños, que la muerte,
Me permitió probar la gloria de tus labios
Antes de sembrar crisantemos en mi boca.

Sombras

¿Cómo nacen las sombras
De los vientos que no tienen
Luz ni materia?
Y sin embargo hielan
El corazón con su estela
De sombras
Hielan y marchitan a su paso todo lo que es mortal.

Perdonad

Perdonad que mi dolor
Se extienda por mi mesa
Y se derrame al suelo
Y ocupe los pasillos y las escaleras
Y llegue a la calle
Y la inunde
Perdonad que os manchen mi dolor
Los pies,
Que suba por las piernas
El tronco, la cabeza y os cubra
Enteros
Perdonad que mi dolor
Se haga truenos y rayos
Y las tormentas rieguen vuestras calles y tierras
Perdonadmelo todo
Porque el dolor es mas intenso que la realidad o la verguenza
Y las calles son anchas y el dolor inmenso
Perdonadmelo todo
Porque en mi no hay sino dolor
Mañana limpiaré los restos
Arrastraré mis pies por la oficina
Me bajaré al asfalto
Y trataré de borrar las huellas del naufragio.